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martes, 16 de octubre de 2012

Recordaron a Nicolás Ruiz Espadero, virtuoso del piano y la composición

Durante la intervención del musicólogo Jesús Gómez Cairo

Un músico cubano a menudo excluido de la nómina de los grandes hombres del pentagrama por desconocimiento o subvaloración, Nicolás Ruiz Espadero (La Habana, 1832-1890), fue recordado en su ciudad natal durante el IV Festival de Música de Cámara Leo Brouwer, que concluida el día 13 de octubre.

Un panel sobre el virtuoso en el aniversario 180 de su natalicio, sesionó en la sala de conciertos inaugurada en diciembre pasado en el Palacio de los Matrimonios de Prado tras una restauración capital del inmueble, asumida por la Oficina del Historiador de La Habana.

En el intercambio, el musicólogo Jesús Gómez Cairo hizo alusión a la creación artística de Espadero, frecuentemente declinada con argumentos que ponen en tela de juicio su cubanía. Al respecto, el especialista recordó que el compositor realizó su obra en un momento en que los elementos que podemos catalogar hoy como cubanos, en lo tocante a la música, se hallaban en un período primario de formación. Se refirió, asimismo, a las encrucijadas que arrostró el músico, entre cuyos discípulos estuvo Ignacio Cervantes.

Espadero, sostuvo Gómez Cairo, contó casi absolutamente con maestros europeos, con la única excepción del cubano Fernando Alí, a su vez formado por mentores del Viejo Continente, lo cual favoreció el contacto del intérprete y compositor con repertorios y creadores foráneos, aunque entre sus referencias cercanas, aclaró el musicólogo, se hallaban las contradanzas de Manuel Saumell.

Asimismo, salió a colación la postura cívica del autor de Canto del guajiro, su sensibilidad ante la esclavitud, por ejemplo, y las referencias que ofrecieron de su obra José Martí y Alejo Carpentier.

Por su parte, el pianista Cecilio Tieles rechazó todo intento de reducir la cultura a esquemas y estereotipos y , tras interpretar Popurrit de aires cubanos, de José White y con arreglo de Espadero, aseguró que los aportes de este último aún esperan por un estudio riguroso.

Como colofón, la soprano española Erika Escribá y el pianista Carlos Apellániz interpretaron Canto del esclavo, de Espadero.

Por estos días, la sala Ignacio Cervantes acogió también un panel sobre la obra del compositor cubano Carlo Borbolla como parte del Festival de Música de Cámara Leo Brouwer.

Por Isachi Fernández

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